Kick Boxing

María Dolores Requena y David del Pino se proclaman

campeones de Andalucía de Kick Boxing

Pedro Martínez sufrió un accidente en su combate que le obligó

a abandonar y tuvo que ‘conformarse’ con el subcampeonato

Los artistas marciales almerienses María Dolores Requena y David del Pino, becados por el Plan Indalo con el que el área de Deportes de la Diputación Provincial apoya a nuestros representantes más destacados, se proclamaron campeones de Andalucía de kick boxing en el torneo disputado los días 23 y 24 de febrero en Málaga.

Requena, preparada por Juan Villanueva Zapata, seleccionador andaluz, revalidó su título en un intenso combate ante la representante granadina, campeona de España de muay thai. La lucha se mostró muy nivelada, pero la técnica de desgaste que utilizó la almeriense, apoyada en su preparación física y en los ‘low kicks’ (patadas circulares a media altura, que suelen conectar en las caras interna y externa de los muslos), su arma preferida, minó notablemente la resistencia de su adversaria y le permitió finalmente revalidar el título conseguido el pasado año, y con él, la posibilidad de disputar nuevamente el cetro nacional, que también obtuvo en la edición de 2007.

David del Pino, discípulo de Miguel García Verdegay, realizó también un combate muy serio, ante un competidor que, no obstante, no pudo aguantar el amplio repertorio de técnicas del almeriense, que ha tenido la oportunidad de entrenar con algunos de los mejores peleadores tailandeses del momento en el tatami de su entrenador. El combate necesitó un ‘extra round’, ante la gran igualdad.

Peor suerte tuvo Pedro Martínez, quien debió competir con ‘Rafita’, un luchador con reputado prestigio en nuestra Comunidad Autónoma, en la categoría de 76 kilogramos. El combate entró en un duro ‘cuerpo a cuerpo’, pero una patada circular de ‘Rafita’ en la rodilla de Martínez provocó una pequeña dislocación y una lesión que ha quedado en simple alarma, puesto que no ha revestido gravedad alguna, pero que no permitió al almeriense continuar la lucha, y le obligó a ‘conformarse’ con un brillante subcampeonato.